LA PRÓSTATA.
Todo hombre después de los 40 años debe estar más consciente de su salud. En este caso, el cuidado de la próstata, ya que es el 2o. cáncer más frecuente en el hombre. Aparte del cáncer de próstata, el otro problema de esta glándula es el crecimiento (hipertrofia) prostático.
El crecimiento se conoce como HIPERTROFIA DE LA PRÓSTATA generalmente benigna, pero que causa molestias. Las molestias más frecuentes son: urgencia para orinar, orinar de noche, interrumpir el chorro de la orina, dificultad para iniciar la micción, sensación que no se ha vaciado la vejiga completamente. La hipertrofia de la próstata afecta también la función eréctil.
Ante esas molestias, hay que determinar si las molestias se relacionan con el crecimiento de la glándula y lo más prudente es acudir al médico y probablemente efectuarse un ultrasonido y un ANTÍGENO PROSTÁTICO ESPECÍFICO (APE) que como primera medida descarte cáncer, aunque no totalmente, es decir que ante cada caso, habrá que efectuar otros análisis para descartar cáncer.
Si en caso no hubiesen molestias urinarias siempre es necesario efectuarse cada año el ANTÍGENO PROSTÁTICO para descartar la presencia de cáncer.
Generalmente el hombre es muy reacio a acudir al médico, especialmente si no tiene síntomas o molestias, pero en el caso de la próstata es importante que el hombre tome esa iniciativa.
Un hombre puede estar desarrollando cáncer de próstata sin saberlo a tiempo.
Si tiene molestias lo más común es que tenga crecimiento de la glándula en forma benigna AUNQUE NO SE PUEDE descartar que tenga ambas cosas es decir un crecimiento (HIPERTROFIA) maligna y peor aún, que no tenga HIPERTROFIA (CRECIMIENTO) y sí pueda estar desarrollando cáncer.
Un diagnóstico a tiempo o tardía hará la diferencia en el pronóstico.